REFLEXIÓN Y ANÁLISIS 5: LAS FUNCIONES DE LOS DOCENTES EN "PULSO AL FRACASO"

Buenas, queridos lectores! Aquí estoy una vez más con ganas de compartir con vosotros mis particulares puntos de vista. En esta ocasión, el tema a tratar gira en torno al documental dirigido por Ricardo de Gracia titulado "Un pulso al Fracaso" y estrenado en 2010. 

El documental se desarrolla en uno de los centros de la Fundación Tomillo, una fundación dedicada al apoyo escolar en la que se evita a toda costa que los alumnos abandonen sus esperanzas de conseguir realizar un trabajo digno o aprender a desenvolverse con cierta soltura en determinadas tareas. Desde el primer plano, el protagonismo cae en una serie de chicos y chicas de barrio que asisten a clases con un método diferente, enfocado a que despierten el interés o consigan motivarse realizando una tarea y no tanto en la adquisición de conocimientos. Aquí se pone de manifiesto el obsoleto y, por desgracia, vigente método de tragar y memorizar datos para luego vomitarlos como si se tratara de comer no tiene éxito con estos jóvenes. 

De todas las funciones del tema 3, he escogido la función de orientación educativa, académica y profesional. La razón de tal elección es mi experiencia personal con el sistema educativo. De pequeño quería ser mecánico, pero las películas y la sociedad son crueles con los mecánicos (leed El Gran Gatsby o ver). Se les representa casi siempre como personas sin estudios. En casi todas las películas americanas hay un paleto y resulta que es mecánico de coches. La conclusión de esto es la siguiente. Te quitan de la cabeza la idea de ser mecánico. Total, que a medida que avanzaban los cursos del instituto empecé a centrarme en las cosas que me gustaban como la música y las culturas clásicas como el latín y el griego. Cuando llegas a cuarto de la eso te hacen elegir y debes elegir entre ciencias o humanidades. No existen bachilleratos centrados en la práctica con sistemas audiovisuales o centrados en formar a futuros estudiantes de grados superiores de formación profesional. ¿Qué sucede? Que los grados de formación profesional están considerados en España como socialmente menores a los universitarios. Sólo hace falta ver los sueldos y realizar un pequeño recorrido presencial por determinadas empresas para darse cuenta de este hecho. El sector del audiovisual y los espectáculos está más desprotegido que nunca y ha hecho falta que venga una pandemia mundial para abrir los ojos de mucha gente. Esto no es ni de lejos lo que sucede en otros países como Portugal o Suecia. Volviendo a mi caso personal, opté por estudiar el grado de Historia y Ciencias de la Música y juntarlo con el Grado de Sonido, grado que nadie me había recomendado hacer en ningún momento de mi estancia académica. 

La conclusión que podemos sacar de todo esto es la siguiente. La sociedad te va a coaccionar a estudiar ciertos estudios en vez de optar por otros porque hay una jerarquía regida por el salario, el prestigio y la permanencia entorno a unas clases sociales predeterminadas. Aquí el papel del orientador educativo debe ser crucial. Al fin y al cabo es el que te tiene que informar y mostrarte todas las posibilidades académicas, además de fomentar tus intereses por determinadas disciplinas. Es difícil realizar una formación profesional cuando no existe. Por esto mismo, como meta en la vida me he propuesto conseguir que se imparta la formación profesional de sonido en algún centro público en Valladolid o promover la inserción de ciertas formaciones que no están presentes y son muy demandadas. 

Retomando la película, podemos observar que los profesores, conscientes del tipo de alumnos que tienen a su cargo, fomentan sus inquietudes. El ejemplo más claro es el de Juan, que cacharrea con circuitos eléctricos. Este muchacho podría ser un buen electricista y probablemente se lo pasaría estupendamente realizando cableados de casas. Con la suficiente motivación y docencia lo conseguiría. Al final, no se trata de ser el mejor en algo, sino en ser útil. En el mundo capitalista lo que importa es el hacer algo y conseguir que te paguen por ello. Si al final consigues hacer algo que te gusta y te pagan, pues mucho mejor.